Lo mejor de 2017 | #TheBestOf2017


Decir que 2017 ha sido un año extraño dentro de la música pop es algo con lo que muchos podríamos estar de acuerdo. Y, sin embargo, probablemente cada uno lo  pensaría por un motivo diferente. 2017 ha sido contradictorio; y en este final de temporada del blog vamos a ver por qué. Aquí tenéis mi selección de lo mejor que ha salido este año.
Mejor single
Esta semana habéis podido ver en mis redes sociales los que para mí han sido los mejores singles de 2017. El comienzo de año fue inmejorable. Harry Styles lanzó un disco debut que, aunque carente de una propuesta personal, ha traído temas brillantes como ese Sign Of The Times. Y el Green Light de Lorde nos llenó de euforia y de ganas de comernos el mundo. Sin duda, temas con el impacto de Look What You Made Me Do, con esa esencia Blackout, tenían que estar en la lista. Sin embargo, al final de año también ha habido momento para las sorpresas, con un ochentero Run For Cover de The Killers que, junto a The Man, me han roto los esquemas.
Aunque, para mí la ganadora estuvo clara hace muchos meses. Kesha con su Praying, dio un giro de 180 grados a su carrera, contando su tormento con una balada desgarradora que muchos soñarían con tener en su discografía. Este fue el pistoletazo de salida de Rainbow, uno de los discos más importantes de una de las tendencias claras de este 2017, el country.
Estas y otras muchas canciones serán las que aparezcan en La Lista de este mes que ya podéis escuchar en Spotify. Como el genial Tell Me You Love Me que no entró por los pelos en la selección, pero que es claramente uno de los mejores singles de 2017.
Mejor videoclip

Estamos en lo que parece ser un periodo de transición en cuanto a vídeos musicales. Los cortos como los de Tove Lo están ahí, pero lo cierto es que salvo excepciones, los videoclips están siendo algo aburridos. La suerte es que, como he dicho, hay excepciones; y las excepciones son realmente buenas. Gaga vino a salvar el pop y lanzó en febrero por sorpresa el vídeo de John Wayne, volviendo a sus inicios con una estética muy Telephone, ambos creaciones de Jonas Akerlund. Pero esta no ha sido la única joya del director en 2017, ya que de su mano también salió el fantástico vídeo de Praying, lleno de fuerza y simbolismo. Dave Meyers fue el encargado de hacer lo propio con Love So Soft, una de las sorpresas de la temporada, con una Kelly Clarkson más diva que nunca. Mención especial también al What About Us de P!nk que podría estar perfectamente entre los elegidos.
Un caso muy interesante ha sido el de Katy Perry con Chained To The Rhythm que, tras el fracaso de Unconditionally, optó por ser oscura de una manera diferente. De esta forma, mantuvo el colorido de sus anteriores eras, pero le dio un trasfondo social muy interesante. Junto a Bon Appétit, dos de los mejores del año.
Aunque, obviamente, la ganadora no podía ser otra que Taylor Swift con Look What You Made Me Do. A la cantante no le bastó con hacer un temón para su retorno, sino que demostró que es de las pocas que puede hacer un vídeo con grandes presupuestos y lleno de referencias y simbolismo.
Mejor Disco

Lo he tenido muy difícil para elegir el mejor disco de este año. Ha habido grandes álbumes muy bien cerrados como Tell Me You Love Me o los giros drásticos de estilo como Younger Now. Aunque he querido elegir entre ellos a Witness por lo valiente de su propuesta y porque creo que va a marcar una tendencia junto a Reputation. Porque ambos revisitan los 80s desde el filtro de los 2000, uno con sonidos más The Fame y otro acercándose más a Blackout. Es de esos 2000 de los que también viene esa vuelta a las indirectas y mensajes a otros cantantes dentro de las propias canciones.
 The xx comenzó 2017 con un álbum que me ha acompañado durante todos estos meses, gracias a esa expansión de sonido que Jamie xx le ha dado a I See You. En el que consiguen además sentirse más liberados y abrirse con el público.
Aunque, son dos los discos que me han sorprendido tanto como para pensar que están a otro nivel. Kesha con Rainbow ha demostrado todo su talento como artista, experimentando con nuevos sonidos y lanzando mensajes que probablemente marquen a muchos jóvenes. Sin embargo, ha sido Lorde la que ha conseguido crear una obra atemporal, que utiliza los sonidos como si fueran colores combinándolos de forma magistral. Melodrama es el reflejo de una generación que lucha por vivir consigo misma; además de ser el mejor álbum de 2017.
Como he dicho, 2017 ha sido un año de contradicciones. Uno en el que el tropical house y el R&B oscuro han pegado, espero, sus últimos coletazos y han dado paso a otros estilos como el country de Younger Now, ritmos latinos como Despacito y el rock de Harry Styles. Rock que, sorprendentemente, han abandonado grandes referentes como P!nk o Kelly Clarkson. Contradictorio, además, ha sido que los artistas más indies han sido los que, abrazando sin complejos sonidos más comerciales, han traído propuestas muy interesantes, como Lana del Rey, The xx o Lorde. Porque sí, algo muy contradictorio ha sido que, a pesar de que todos busquen esa imagen de cantautor, luego haya aparecido el pop comercial sin aditivos de Dua Lipa o Charlie XCX, que también ha gustado mucho.
Otra de las tendencias de las que más me alegro es la vuelta de las grandes divas. Tímidamente se va viendo cómo ese tipo de figuras que el público había rechazado, vuelven con propuestas polémicas y visualemente soprendentes como la de Taylor Swift. Es por eso que no puedo esperar a analizar lo nuevo de Christina Aguilera, Beyoncé, Rihanna o Lady Gaga el año que viene, en una nueva temporada del blog.


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